La seguridad en propiedades históricas requiere soluciones no invasivas que preserven integridad estructural. Los sistemas inalámbricos con sensores de adhesión magnética evitan daños a carpinterías originales. Las cámaras térmicas o con tecnología LiDAR permiten vigilancia efectiva sin alterar fachadas mediante instalaciones visibles.
Para alarmas en estructuras sensibles, los sensores sísmicos detectan intentos de intrusión mediante vibraciones en muros y ventanas. La vigilancia perimetral con cámaras panorámicas reduce el número de puntos de instalación necesarios. Los sistemas de iluminación de seguridad con diseños arquitectónicamente compatibles mantienen el carácter histórico mientras disuaden intrusiones.