La seguridad empresarial requiere niveles de disponibilidad que van más allá de las soluciones residenciales. La redundancia en las comunicaciones es fundamental – conexiones por fibra óptica respaldadas por enlaces 4G/5G garantizan que la alarma pueda transmitirse incluso durante fallos de infraestructura. Los sistemas de alimentación ininterrumpida (SAI) con autonomía extendida mantienen operativa toda la vigilancia durante cortes eléctricos prolongados.
La arquitectura de los sistemas empresariales incorpora servidores locales que almacenan las grabaciones de las cámaras como respaldo del almacenamiento en la nube. La seguridad de los datos se asegura mediante encriptación end-to-end y firewalls específicos para sistemas de vigilancia. Los protocolos de recuperación ante desastres inclinen réplicas geográficas de la configuración del sistema, permitiendo restablecer la seguridad completa en horas incluso ante fallos catastróficos.