Alarmas y Videovigilancia

¿Cómo se instala un sistema de alarma típico?

La instalación varía radicalmente dependiendo del tipo de sistema elegido. Para los sistemas de alarma inalámbricos que predominan en el mercado de autogestión, el proceso es notablemente sencillo y es una de sus principales ventajas. La mayoría de usuarios relatan que sigue un patrón similar: se desembala el kit, se conecta la base central a una toma de corriente y a internet, y se procede a emparehar cada sensor.

El emparejamiento normalmente implica un modo de «aprendizaje» en la centralita y luego pulsar un botón en cada sensor de puerta, ventana o movimiento. La aplicación móvil guía al usuario paso a paso, indicando cuándo colocar cada sensor y cómo nombrarlo («Puerta Principal», «Ventana Cocina»). La colocación se hace con cinta adhesiva de doble cara o tornillos, y todo el proceso puede tomar entre 30 minutos y un par de horas para una vivienda promedio.

Para los sistemas cableados, la instalación es un mundo aparte y casi siempre requiere un técnico profesional. Implica pasar cables a través de las paredes y techos, conectar cada sensor al panel central y asegurar que todo el sistema funcione como un conjunto integrado. Es un trabajo sucio, que requiere tiempo y conocimientos de electricidad, pero que resulta en una instalación limpia y permanente que no depende de baterías.